Espionaje en México: gasto y pérdida de inversión

La compañía israelí NSO Group desarrolló el software de espionaje Pegasus. Desde la administración de Felipe Calderón, se utilizó en México y su uso se incrementó considerablemente durante la gestión de Enrique Peña Nieto. Existen ejemplos registrados de acciones realizadas a periodistas, activistas y políticos.  Gasto sin claridad En la gestión de Peña Nieto, se habrían asignado millonarios recursos públicos para la adquisición de Pegasus. Los documentos divulgados y declaraciones durante un juicio en Israel señalan que se abonaron sobornos de 25 millones de dólares. Estos pagos se realizaron a cambio de acuerdos para comercializar el software de espionaje en México. En el ámbito local, la Fiscalía General de la República (FGR) se encarga de investigar el posible soborno al ex mandatario Peña Nieto. Han pedido asistencia a Israel para conseguir los documentos requeridos. Efecto en la confianza y la inversión La ausencia de claridad en la adquisición de programas de espionaje provoca la impresión de autoritarismo, deteriorando la confianza de inversionistas tanto nacionales como foráneos. Hay peligro de perder la reputación positiva en México y ser considerado un país en el que el Estado puede espiar a periodistas y activistas. Esto lo convierte en menos interesante para inversiones que aprecian la libertad de expresión y los derechos digitales. Además, impacta en una reducida cooperación internacional, dado que el escándalo de espionaje podría obstaculizar alianzas, financiación y tecnología global enfocados en la seguridad pública o en inversiones innovadoras. Costos imperceptibles y necesidad de controles. La ausencia de claridad en estos acuerdos puede provocar un uso indebido de fondos públicos, además perjudica la reputación y la competitividad de la nación. Para restaurar la confianza en el gobierno, es necesario un mayor acceso público a los acuerdos de espionaje. Además, es necesario incluir un resumen de las cantidades, proveedores y procedimientos de adquisición. Además, resulta crucial contar con controles judiciales y auditorías autónomas. Estas auditorías deben evaluar las adquisiciones previo y posterior a su aprobación. Además, deben haber sanciones explícitas para los culpables en caso de anomalías.

Corrupción en el sexenio de Peña Nieto: impacto económico

La corrupción sigue siendo un gran problema para el desarrollo económico de México. Durante el mandato de Enrique Peña Nieto, ocurrieron muchos eventos. Estos eventos dañaron la confianza de los inversionistas. También afectaron el gasto público y la salud financiera del país. Grandes escándalos del sexenio La “Casa Blanca” y conflictos de interés En 2014, se dio a conocer que la esposa de Peña Nieto compró una lujosa mansión de 7 millones de dólares. La casa fue comprada a una empresa que tenía contratos con el gobierno. Esto causó críticas en los medios y un escándalo por conflicto de interés. Sin embargo, la Secretaría de la Función Pública la exoneró al final La “Estafa Maestra” En 2017, un informe periodístico mostró que el gobierno federal desvió más de 400 millones de dólares. Esto ocurrió a través de contratos a amigos del Estado. Los contratos se dieron mediante universidades públicas y empresas fantasma. Sobornos de Odebrecht La constructora brasileña pagó unos 10.5 millones USD a funcionarios mexicanos, incluyendo a quienes estaban cerca de Peña Nieto, para ganar contratos estratégicos en Pemex. Emilio Lozoya, exdirector de Pemex, fue detenido en 2020, evidencia de redes más profundas Pegasus y nuevos señalamientos de corrupción Compra del software espía Pegasus En julio de 2025, fuentes de Israel dijeron que Peña Nieto recibió 25 millones de dólares en sobornos. Los empresarios israelíes Avishai Neriah y Uri Ansbacher están relacionados con la compra de Pegasus. Este software se usó para espiar a periodistas, opositores y activistas Reacción oficial El expresidente ha negado las acusaciones y la Fiscalía General, encabezada por Alejandro Gertz, ha abierto investigación y solicita información de Israel Impacto en la economía mexicana La percepción de corrupción deteriora la confianza de inversionistas. Según Transparencia Internacional, en 2022 México obtuvo solo 43/100 en el índice de percepción de corrupción, ocupando el lugar 124 de 180 países  El INEGI estima que la corrupción le cuesta a México cerca del 5 % del PIB cada año. Esto quiere decir, más de 500 mil millones de pesos. Esa cantidad representa fondos que no se invierten en salud, educación o infraestructura.  Costos colaterales y sociales Desigualdad y pobreza. La corrupción quita riqueza a los más vulnerables y la da a los poderosos. Inseguridad. Hay pruebas de que el crimen organizado colabora con funcionarios. En el caso de Ayotzinapa, se dice que Peña Nieto conocía estos vínculos. Erosión institucional. La impunidad es muy alta. Un análisis muestra que 92 de cada 100 actos de corrupción no son castigados La corrupción en el gobierno de Enrique Peña Nieto tuvo grandes consecuencias para México. Detuvo el crecimiento económico y desvió recursos importantes. También debilitó la confianza de la gente y la legitimidad de las instituciones. Es esencial abordar estos casos con justicia y transparencia. Se necesita voluntad política para reconstruir un país más fuerte, confiable y justo.

¿Qué es Pegasus y cuánto le costó a México?

¿Qué es el software Pegasus? Pegasus es un software espía creado por la empresa israelí NSO Group, destinado a infiltrarse de manera invisible en dispositivos iOS y Android. Fue creado para luchar contra el crimen y el terrorismo. Sin embargo, se ha documentado que gobiernos lo usan para espiar a periodistas, activistas, opositores políticos y ciudadanos comunes. Técnicamente, Pegasus puede leer mensajes, grabar el micrófono y acceder a la cámara, entre otras capacidades invasivas. ¿Por qué es polémico? Desde 2016, Citizen Lab y Lookout revelaron que Pegasus puede romper las defensas de los smartphones. Esto sucede sin que el usuario tenga que hacer nada, en ataques llamados “zero-click”. Además, datos filtrados en 2021 mostraron más de 50,000 números objetivo en todo el mundo, y un gran porcentaje pertenecían a México. El uso de Pegasus en México Pionero y consumidor activo: México fue el primer país en adquirir Pegasus en 2011 para ayudar en la captura de “El Chapo”. Bajo las administraciones de Calderón y Peña Nieto, su uso se expandió hacia el espionaje de periodistas, defensores de derechos humanos y opositores. Controversias y filtraciones: Durante el gobierno de López Obrador, al menos 456 números de mexicanos fueron intervenidos. Esto ocurrió entre abril y mayo de 2019. Esto muestra que se siguió usando, a pesar de las promesas de regularlo. ¿Cuánto pagó México por Pegasus? 60–61 millones de dólares es la cifra oficial reconocida por funcionarios de seguridad, los gobiernos de Calderón y Peña Nieto pagaron ese monto por el software espía. Sin embargo, en estudios más grandes se menciona que los gastos totales en contratos del software fueron de aproximadamente 300 millones de dólares. Esto ocurrió entre 2012 y 2018. Esto incluye pagos sospechosos y posibles sobornos. En octubre de 2022, la Fiscalía indagó una compra por 457 millones de pesos realizada por la PGR durante el sexenio anterior.  Estos montos indican que un software diseñado para combatir la delincuencia se transformó en una herramienta de espionaje interno. El dinero público y las prácticas turbias en compras de tecnología de vigilancia han violado derechos civiles, confidencialidad y confianza en las instituciones mexicanas.

Gentrificación en CDMX: Crítica al gobierno mexicano

gentrificación CDMX

   La reciente marcha en contra de la gentrificación que se realizó el 6 julio debido al aumento de extranjeros en tierras mexicanas y el alza de precios en las viviendas ha causado revuelo. Entre carteles y destrozos, la ciudad se manifestó, abriendo el debate de ¿quién tiene derecho a habitar la ciudad? ¿Y quién está encareciéndola?.      En la Ciudad de México, son cada vez más frecuentes los casos de racismo y clasismo,  relacionados a la gentrificación y a el aumento de extranjeros especialmente en zonas céntricas de la ciudad. En respuesta, los ciudadanos se han manifestado de diferentes formas, desde actos violentos ante viviendas ocupadas por foráneos hasta diversas formas de reclamar el espacio público como propio, como en el caso de Sinaloa en donde los ciudadanos comenzaron a llevar bocinas a las playas, con música regional a todo volumen frente a turistas extranjeros.  El episodio más mediático, fue el de la marcha en contra de la gentrificación que sucedió recientemente en Ciudad de México, la marcha se promulgó pacífica, buscaba una mejora en la alza de precios en viviendas y denunciar la especulación inmobiliaria, sin embargo, la marcha tuvo un giro que terminó en violencia y destrozos principalmente a comercios y viviendas, muchas de ellas pertenecientes a mexicanos.  Ante los hechos, la presidenta Claudia Sheinbaum calificó el acto como un “error de enfoque” y condenó las expresiones de xenofobia, “No vamos a permitir ningún acto de odio. México ha sido siempre un país hospitalario, pero también vamos a defender el derecho a la vivienda y a la ciudad para todos”, declaró durante una conferencia en Palacio Nacional.   Airbnb y los nómadas digitales  Con el tiempo el término “gentrificación” ha ido perdiendo valor, su significado se refiere al proceso en el que zonas urbanas son desplazadas por grupos de mayor actividad económica, elevando precios y expulsando a los habitantes originales.  En palabras de la urbanista Alejandra Spitalier, “la gentrificación en México es menos vistosa que en otras ciudades, pero más brutal: tiene un rostro de desigualdad estructural, no de renovación”. Sin embargo, hay que entender que la gentrificación no es exclusiva de los extranjeros, Ruth Glass, socióloga y la responsable del término, describe el fenómeno como, “Una transformación física y social de un espacio, que tiene que ver con inversión del sector inmobiliario y comercial, o con intervenciones públicas o privadas”.  Pero entonces, ¿Quienes son los responsables? Ante un fenómeno de esta magnitud es difícil señalar un solo responsable. Con la llegada de la pandemia en 2020 y el aumento de los nómadas digitales, las plataformas de vivienda temporal comenzaron a tener un impacto significativo en este fenómeno.  La falta de políticas públicas, el aumento de precios y el déficit en viviendas, además de la evidente desigualdad socioeconómica que sufre este país están relacionadas con que este problema persista.    Sheinbaum garantiza el Derecho a la vivienda  En 2022, la entonces jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, firmó un acuerdo con Airbnb y la UNESCO para promover la ciudad como destino para nómadas digitales. El objetivo era atraer inversión y fomentar el turismo creativo. Lo que no se midió del todo fue el impacto en el precio de la vivienda. La periodista Georgina Zerega lo resume para El País: “El gobierno local abrió las puertas a Airbnb sin mecanismos de control, y ahora enfrenta las consecuencias de haber convertido zonas enteras en hoteles sin regulación clara”.  Sin embargo, ante la reciente marcha, la ahora presidenta Claudia Sheinbaum, condenó la xenofobia y destacó la importancia de la vivienda segura para todos. “La Ciudad de México siempre ha sido una ciudad hospitalaria”, declaró, “pero también debe garantizar el derecho a la vivienda para todos”. Acompañada por Clara Brugada, actual jefa de Gobierno de la CDMX, Sheinbaum anunció una estrategia nacional para regular el alquiler de corto plazo, en coordinación con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).  La estrategia busca limitar la cantidad de propiedades por persona que se puedan rentar y mantener un control de impuestos más estricto.   

T-MEC en tensión: desafíos para México

T-MEC

  El T-MEC atraviesa uno de sus momentos más delicados desde su entrada en vigor. Con los aranceles impuestos por Estados Unidos dedicados al acero y aluminio, México propuso adelantar la revision del tratado para 2025.   Estados Unidos elevó al 50 % los aranceles al acero y aluminio mexicanos, el doble de lo acordado originalmente. Esta decisión, tomada bajo el argumento de proteger su industria nacional afectó directamente a las exportaciones mexicanas, que cayeron un 3 % en abril. Empresas clave como Deacero y ArcelorMittal resienten el impacto. El secretario de Economía Marcelo Ebrard, busca negociar una excepción o un cupo libre de aranceles que permita mantener la competitividad en este sector. A la par de esta tensión, la revisión del T-MEC se adelantará a la segunda mitad de 2025. Aunque estaba programada originalmente para 2026, México propuso esta modificación para despejar incertidumbres, atraer inversión y reforzar su papel como socio confiable en América del Norte.    Retos y señales mixtas para la inversión El país participa en casi el 15 % del comercio total de Estados Unidos, y más de la mitad de su PIB depende de las exportaciones, lo que le otorga una base sólida para sentarse a negociar. Sin embargo, organismos como el FMI han alertado sobre una posible contracción del 0.3 % en la economía mexicana en 2025, alimentada por la incertidumbre comercial y los riesgos geopolíticos globales. Además de los aranceles, EE.UU. acusa a México de imponer barreras que dificultan el comercio. El informe de la Oficina del Representante Comercial de EE.UU. (USTR) señala obstáculos en sectores como energía, telecomunicaciones, salud, agricultura y propiedad intelectual. Estas restricciones, si bien responden a políticas internas, afectan las reglas del juego para los inversionistas estadounidenses y erosionan la confianza entre socios comerciales. A pesar de todo, México reportó cifras históricas de inversión extranjera directa en el primer trimestre de 2025, con más de 21 mil millones de dólares, un aumento del 5.4 % respecto al año anterior. Esta resiliencia se explica por el interés de diversas industrias en el modelo de “nearshoring”, donde la cercanía geográfica con Estados Unidos y una fuerza laboral competitiva hacen de México un destino atractivo para relocalizar cadenas de suministro.   El futuro del T-MEC y el papel de México en la región El gobierno de Claudia Sheinbaum lanzó el “Plan México” para fortalecer la industria, atraer inversión y reducir la dependencia de insumos asiáticos. El plan incluye incentivos fiscales para pequeñas y medianas empresas, así como mejoras en infraestructura logística. Aunque ambicioso, su éxito dependerá de mantener estabilidad política, claridad regulatoria y un entorno internacional más predecible. El efecto de toda esta dinámica en México es profundo. Los aranceles encarecen insumos clave para industrias como la automotriz y la construcción, lo que podría frenar exportaciones y afectar el empleo. Al mismo tiempo, las barreras regulatorias generan tensiones que, si no se resuelven, pueden poner en duda los beneficios del tratado. La revisión del T-MEC será una oportunidad para ordenar este entorno y recuperar la confianza.  Los inversionistas deben apostar a la diversificación geográfica, monitorear muy de cerca cualquier cambio en las negociaciones del T-MEC y poner especial atención a los sectores relacionados con infraestructura , logística y manufactura regional. A mediano plazo, México sigue siendo un socio estratégico clave en América del Norte, pero su atractivo dependerá de su capacidad para mantener reglas claras, relaciones comerciales estables y una política industrial coherente. Escrito por Paola Gámez