¿Qué pasó en las urnas?
El partido demócrata sacó buenas victorias: en Nueva York, su candidato Zohran Mamdani se convirtió en alcalde y rompió varias barreras al convertirse en el primer alcalde musulmán de la ciudad. También ganaron los demócratas en elecciones de gobernador en Virginia y New Jersey, y en California aprobaron una medida clave de redistritación que favorece a su bando. Todo esto llegó con un electorado que tenía en mente el pobre desempeño de la economía y un desencanto con la polarización.
¿Y los mercados qué dijeron?
Hubo varios movimientos interesantes:
- El dólar se fortaleció bastante. El índice de referencia (DXY), que mide el valor del dólar frente a una canasta de monedas extranjeras, aparece en niveles próximos a 98.4 al inicio de noviembre de 2025, frente a ~96.8 en periodos recientes, señal de que los inversionistas están buscando refugio o apostando a políticas más conservadoras en el gasto fiscal.
- Esta semana los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE. UU. subieron de forma destacada: el rendimiento del bono a 2 años aumentó aproximadamente 9 puntos básicos (bps) y el del bono a 10 años cerca de 8 bps, lo que puede interpretarse como que hay altas expectativas de inflación o una prolongación de tasas altas.
- El mercado de acciones no estuvo tan contento con las grandes tecnológicas: hubo caídas de más de 1 % en días recientes, lo que muestra que los inversionistas se están moviendo hacia una visión más cautelosa, especialmente cuando las tasas de los bonos se encuentran altas.
- En Asia las tecnológicas también se vieron golpeadas, lo que sugiere un efecto global de esta “incertidumbre resuelta”, pero con nuevos interrogantes encima.
¿Por qué debería importarte?
Porque aunque haya pasado el día de la elección, el real juego empieza ahora: ¿quién manda en el Congreso?, ¿qué tipo de políticas vienen?, ¿cuánto se gastará?, ¿habrá más regulación o menos?, ¿la Fed va a flexibilizar o endurecer? Todo eso tiene implicaciones directas para las empresas, sectores y valoraciones. Por ejemplo:
- Si los demócratas tienen más poder, energías limpias, salud, tecnología “verde” podrían tener viento a favor.
- Si los republicanos logran frenar los planes demócratas o mantener poder, puede que veamos recortes de impuestos, menos regulación, impulso para energía tradicional, defensa, etc.
- Independientemente de si las tasas se mantienen altas o la inflación se reactiva, las empresas de crecimiento (tecnología) pueden sufrir porque sus valoraciones dependen mucho del futuro y de tasas bajas en los bonos de gobierno.
¿Y qué hacer?
Para los inversionistas, la mejor opción es rebalancear el portafolio y aprovechar buenas oportunidades en la bajada de precios para las acciones tecnológicas, evitando la sobreexposición, adquiriendo bonos del gobierno. Por otro lado, mantener buenos niveles de liquidez con la cual afrontar la inestabilidad política internacional, y poder inclinar nuestra selección de activos más a los sectores que más peso tengan en lo político, o bien demócrata, o bien republicano.